Jim Sinclair, 1999
No soy una “persona con autismo.” Soy una persona autista. ¿Por qué me importa esta distinción?
1) Decir "persona con autismo" sugiere que el autismo puede separarse de la persona. Pero no es así. Puedo separarme de cosas que no forman parte de mí, y sigo siendo la misma persona. Suelo ser una "persona con una camisa morada", pero también podría ser una "persona con una camisa azul" un día, y una "persona con una camisa amarilla" al día siguiente, y seguiría siendo la misma persona, porque mi ropa no forma parte de mí. Pero el autismo forma parte de mí. El autismo está integrado en el funcionamiento de mi cerebro. Soy autista porque no puedo separarme del funcionamiento de mi cerebro.
2) Decir "persona con autismo" sugiere que, aunque el autismo forme parte de la persona, no es una parte muy importante. Las características que se reconocen como centrales en la identidad de una persona se enuncian adecuadamente como adjetivos, e incluso pueden utilizarse como sustantivos para describir a las personas: Hablamos de personas "masculinas" y "femeninas", e incluso de "hombres" y "mujeres" y "niños" y "niñas", no de "personas con masculinidad" y "personas con feminidad". Describimos las identificaciones culturales y religiosas de las personas en términos como "ruso" o "católico", no como "persona con rusismo" o "persona con catolicismo". Describimos aspectos importantes de los roles sociales de las personas en términos como "padre" o "trabajador", no como "persona con descendencia" o "persona que tiene un trabajo". Describimos aspectos importantes de la personalidad de las personas en términos como "generoso" o "extrovertido", no como "persona con generosidad" o "persona con extroversión". Sin embargo, el autismo va más allá de la cultura y los sistemas de creencias aprendidos. Afecta a la forma en que nos relacionamos con los demás y a la forma en que encontramos lugares en la sociedad. Afecta incluso a cómo nos relacionamos con nuestro propio cuerpo. Si no tuviera un cerebro autista, la persona que soy no existiría. Soy autista porque el autismo es una característica esencial de mí como persona.
3) Decir "persona con autismo" sugiere que el autismo es algo malo, tan malo que ni siquiera es compatible con ser una persona. Nadie se opone a utilizar adjetivos para referirse a características de una persona que se consideran positivas o neutras. Hablamos de personas zurdas, no de "personas con zurdera", y de personas atléticas o musicales, no de "personas con atletismo" o "personas con musicalidad". Podemos llamar a alguien "persona de ojos azules" o "persona con ojos azules", y nadie se opone a ninguno de los dos calificativos. Sólo cuando alguien ha decidido que la característica a la que se refiere es negativa, de repente la gente quiere separarla de la persona. Yo sé que el autismo no es algo terrible y que no me hace menos persona. Si a otras personas les cuesta recordar que el autismo no me hace menos persona, ese es su problema, no el mío. Que encuentren la manera de recordar que soy una persona, sin intentar definir una característica esencial de mi persona como algo malo. Soy autista porque me acepto y me valoro tal y como soy.
Original https://docs.google.com/document/d/12V4kRbz882q6UUeNbPB4ZxG8w8vfsxmSp2bMD2HpDQc/edit
Traducción @Saided DePriest | @NeurodiverLetras Âû
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